Buenos días,
estamos terminando el verano y parece que el otoño ya quiere hacerse ver tirando las hojas de los árboles. Me gusta mucho esta época porque ya vemos en los escaparates la ropa de abrigo y apetece que haga frío aunque sea solo un dia para poder resguardarnos dentro de uno de esos acogedores abrigos, eso sí, al rato ya miramos la predicción del tiempo y queremos que vuelva el sol para aprovechar estos últimos días de lo que queda del verano.. jeje como buenos asturianos nunca estamos conformes con el tiempo.
A lo que vamos, mi horno se ha puesto a temblar porque me he apuntado a un curso de Bizcochos Avanzados que imparte Isabel, de Aliter Dulcia, online. Lo de que sea online es una faena ya que ella sube recetas y nosotros tenemos que hornear, y no solo un bizcocho, si no que unos cuantos, asi que, que no os extrañe verme en el parque poniendo un puesto de bizcochos.. jeje.
En la primera semana hemos hecho esta suavidad de bizcocho, a mi me recuerda a los bizcochos de soletilla, porque la parte de arriba se queda con una corteza dulce espectacular y el interior es aire, suavidad, esponja, no se, pero es una delicia. Repetiré sin duda. Lo mejor de todo, que se hace muy rápido, y solo lleva tres ingredientes, huevos, azucar y harina:
La preparación no es más complicada:
Batir las claras a punto de nieve muy bien, aparte batir las yemas con el azúcar bien, e incorporarle la harina tamizada; a esta mezcla incorporar poco a poco las calaras montadas y hornear a 170 grados durante una hora.
Por ultimo dejarlo enfriar, desmoldar, decorar con azucar glass por encima y empezar a disfrutar.
Yo lo hice con la mitad de los ingredientes y lo horneé en un molde de 26 cm por eso me quedó bajito, pero vamos que de sabor está inigualable, para repetir una y mil veces.
estamos terminando el verano y parece que el otoño ya quiere hacerse ver tirando las hojas de los árboles. Me gusta mucho esta época porque ya vemos en los escaparates la ropa de abrigo y apetece que haga frío aunque sea solo un dia para poder resguardarnos dentro de uno de esos acogedores abrigos, eso sí, al rato ya miramos la predicción del tiempo y queremos que vuelva el sol para aprovechar estos últimos días de lo que queda del verano.. jeje como buenos asturianos nunca estamos conformes con el tiempo.
A lo que vamos, mi horno se ha puesto a temblar porque me he apuntado a un curso de Bizcochos Avanzados que imparte Isabel, de Aliter Dulcia, online. Lo de que sea online es una faena ya que ella sube recetas y nosotros tenemos que hornear, y no solo un bizcocho, si no que unos cuantos, asi que, que no os extrañe verme en el parque poniendo un puesto de bizcochos.. jeje.
En la primera semana hemos hecho esta suavidad de bizcocho, a mi me recuerda a los bizcochos de soletilla, porque la parte de arriba se queda con una corteza dulce espectacular y el interior es aire, suavidad, esponja, no se, pero es una delicia. Repetiré sin duda. Lo mejor de todo, que se hace muy rápido, y solo lleva tres ingredientes, huevos, azucar y harina:
8 claras de huevo
8 yemas
300 g azúcar
150 g harina
La preparación no es más complicada:
Batir las claras a punto de nieve muy bien, aparte batir las yemas con el azúcar bien, e incorporarle la harina tamizada; a esta mezcla incorporar poco a poco las calaras montadas y hornear a 170 grados durante una hora.
Por ultimo dejarlo enfriar, desmoldar, decorar con azucar glass por encima y empezar a disfrutar.
Yo lo hice con la mitad de los ingredientes y lo horneé en un molde de 26 cm por eso me quedó bajito, pero vamos que de sabor está inigualable, para repetir una y mil veces.
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